Hipótesis sobre la violencia en una sociedad implosionando.
Resumen
Comenzamos con un enunciado que tiene más de perturbador que de provocador. No vivimos en una sociedad violenta; una sociedad implosionando no es una sociedad violenta o en donde la violencia aumenta. Una sociedad implosionando, más precisos, lo social implosionando es algo mucho peor que la violencia social. O, al menos y para no cargar y de entrada las hipótesis, es algo diferente a la violencia social. Por eso decimos que no estamos atravesando tiempos violentos, sino algo mucho más inquietante. Lo social implosionando (la forma que toma el lazo social en la precariedad) se devora los diagnósticos y las categorías conocidas. Si decimos que lo que hay es una sociedad violenta, corremos el riesgo de asumir la perspectiva de la anomia y el caos. Y con ella, toda una manera de intervenir, un imaginario de reposición, ciertos “verbos” asociados a esa forma de ver (contener, reparar, controlar, aquietar), protocolos, lenguajes, y maneras reconocibles de indignarse o asombrarse.